La entrevista que Juan Gustavo Cobo Borda le hizo a Gabriel García Márquez en 1981 sobre novela y poesía.
Por Juan Gustavo Cobo Borda (*)
El lunes 23 de marzo almorcé con Gabriel García Márquez en su blanco apartamento enclavado en los cerros desde los cuales se divisa toda Bogotá. Comimos pollo con verduras, pepinos y un bizcocho. Esa noche el presidente hablaría por televisión y anunciaría la ruptura de relaciones con Cuba.
Luego, en la sala, tomó café, leyó poemas inéditos de su amigo Álvaro Mutis, y lanzó, una vez más, delirantes declaraciones de entusiasmo ante el autorretrato previamente abaleado, que le había regalado el maestro Alejandro Obregón. Solo entonces fuimos capaces ambos de sacar fuerzas de flaqueza y meternos en su estudio «a trabajar».